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Oxigenoterapia y aerosolterapia

Técnicas y Procedimientos

Carmona Ponce, Juan Diego

La oxigenoterapia es el procedimiento por el que se aumenta la concentración de oxígeno en el aire inspirado (FiO2) por el paciente con la intención de incrementar su presión arterial de oxígeno (PaO2).

 

INDICACIONES CONTRAINDICACIONES
–   Hipoxemia documentada

–   Situaciones de gravedad en las que aumenta el consumo de oxígeno (convulsión, sepsis…)

–   Hipertensión pulmonar

–   Intoxicación por monóxido de carbono

–   Procedimientos de analgesia y sedación

No existen contraindicaciones absolutas

Relativas:

–   Pacientes con enfermedad pulmonar crónica (por riesgo de hipoventilación

–   Pacientes con cardiopatía con shunt I-D (por riesgo de hiperaflujo pulmonar)

 

MÉTODOS DE ADMINISTRACIÓN

A continuación, presentamos una tabla secuencial con los diferentes métodos para administrar oxigenoterapia a un paciente en función de la Fio2 que precisemos aportar. Lo ideal es que el oxígeno sea humidificado (para evitar sequedad de secreciones) y calentado (para prevenir hipotermia y broncoespasmo). En cualquiera de estas situaciones debe monitorizarse la saturación de hemoglobina mediante pulsioximetría.

 

  SISTEMA FLUJO LPM FiO2 MÁXIMA ALCANZADA OBSERVACIONES
SISTEMAS DE OXIGENOTERAPIA DE BAJO FLUJO

El flujo no supera el flujo inspiratorio del paciente, por lo que no podemos conocer con certeza la Fio2 que se consigue. La Fio2 depende de la FR y del volumen corriente (volumen-minuto) así como del flujo de oxígeno.

Cánulas (o gafas) nasales 1-5 (en lactantes limitar a 2 lpm) 40% Para hipoxemia leve-moderada, polipnea leve. Contraindicada si sospecha de fractura de base de cráneo.
Mascarilla simple 6-10 60% Para periodos cortos. Flujos menores de 6 lpm tienen riesgo de reinhalación de CO2.
Mascarilla con reservorio Mínimo 10 90% Flujos menores de 10 lpm tienen riesgo de reinhalación de CO2. La FiO2 depende de la capacidad inspiratoria del paciente. Existen 2 tipos de mascarillas: de reinhalación parcial  (Fio2 40-70% con flujo 6-15lpm) y de no reinhalación (Fio2 60-90% con flujos 10-15lpm).
SISTEMAS DE OXIGENOTERAPIA DE ALTO FLUJO

 

 

 

El flujo que proporciona el sistema supera el flujo inspiratorio del paciente. Por ello proporcionan casi la totalidad del gas respirado por el paciente, por lo que existe menor mezcla con aire ambiental. Es factible alcanzar Fio2 cercanas al 100%

Mascarilla Venturi Verificar flujo según indicación del fabricante 50% FiO2 es constante y no se modifica por la FR o el esfuerzo respiratorio del paciente
Cánulas nasales de alto flujo

Existen sistemas específicos de aplicación:  Vapotherm® , AIRVO2®, F&P 850 system®

8-40 lpm

Programar flujo según peso del paciente:

10 primeros Kg a 2 lpm/kg, a partir de ahí 0,5 lpm/kg

21-100% Son cánulas nasales de baja resistencia que permiten administrar mezclas controladas de aire y oxígeno (consiguiendo la FiO2 deseada) a flujos muy elevados que superen el flujo inspiratorio del paciente. Puede generar un discreto aumento de la presión CPAP a nivel de la vía respiratoria, sobre todo en recién nacidos y lactantes. Su uso es sencillo y suele tener buena tolerancia clínica.
Bolsas autoinflables (ambú ®) sin reservorio 15 60% Para pacientes en PCR, en apnea o con respiración ineficaz o en PCR.
Bolsas autoinflables (ambú®) con reservorio 15 100% Para pacientes en PCR, en apnea o con respiración ineficaz o en PCR

 

AEROSOLTERAPIA Y NEBULIZACIÓN

Procedimiento de administración de un fármaco o elemento terapéutico mediante vaporización. Existen distintos tipos de nebulizadores, los más utilizados son neumáticos o de tipo “jet” que funcionan por efecto Venturi. En ellos, un gas comprimido (aire u oxígeno) actúa sobre la medicación situada en un reservorio para generar partículas de aerosol que son dispersadas continuamente.

Entre las ventajas de las nebulizaciones se encuentran un fácil acceso al sistema broncoalveolar (la acción más directa y dirigida) y por tanto un menor requerimiento de dosis de los fámacos. Permite la administración simultánea de fármacos y es compatible con el uso de oxigentorapia y ventilación asistida. En cambio como desventaja se presentan la inexactitud de la dosis que se deposita en los pulmones, es una terapia ruidosa y que precisa una fuente de energía. Puede producir taquicardia e hiperreactividad bronquial en los niños.

El flujo de oxígeno recomendado para terapia broncoalveolar es de 8 lpm. La reducción del flujo a 6 lpm puede limitar su biodisponibilidad. Hasta un 30%. Para terapia de la vía aérea superior (orofaríngea o laríngea) debe hacerse a flujos más bajos 4-6lpm, ya que estos flujos favorecen la impactación de las partículas a ese nivel.

El volumen total de la solución a nebulizar se recomienda que sea entre 3-5 ml. La mayoría de la mediación nebulizada se administra en los primeros 5 minutos. Aumentar el tiempo de nebulización por encima de 10 minutos no ofrece ninguna ventaja.

Cuando un paciente está llorando se reduce marcadamente el depósito en los pulmones, por lo que convendría en este caso administrarlo mientras el paciente duerme.

A continuación, presentamos una tabla con los medicamentos más usados habitualmente en forma de nebulización.

 

   
SALBUTAMOL –     0,15 mg/Kg/dosis (máximo 5 mg) nebulizado a flujo de 8 lpm (se puede repetir 3 dosis en urgencias separadas 20 minutos)

–     0,3-0,5 mg/kg/h en nebulización continua en crisis de asma grave durante la hospitalización (máximo 20 mg/h)

–     En crisis asmática y broncoespasmos moderados y graves.

BROMURO DE IPRATROPIO –     Neonatos 25 mcg/kg/dosis nebulizado a flujo de 6 lpm

–     250 mcg (en menores de 30 Kg) nebulizado a flujo de 6-8 lpm

–     500 mcg (en mayores de 30 Kg) nebulizado a flujo de 6-8 lpm

–     En crisis asmática grave junto con Salbutamol. Puede adminsitarse en el mismo aerosol que salbutamol

–     Se puede repetir 3 dosis en urgencias separadas 20 minutos.

BUDESONIDA

 

–     2 mg (dosis fija en laringitis) nebulizado a flujo de 5 lpm

–     En laringitis aguda como sustitutivo o alternativa a la dexametasona

ADRENALINA –     0,1-0,3 mg/kg/dosis (máximo 3 mg) nebulizado a flujo de 6 lpm en bronquiolitis (puede nebulizarse con SSH 3% o SSF).

–     0,3-0,5 mg/kg/dosis (máximo 5 mg) nebulizado a flujo de 4-6 lpm en laringitis moderada o grave. Puede admnistrarse en el mismo aerosol que budesonida). Puede repetirse cada 2 horas.

SUERO SALINO FISIOLÓGICO –     3-5 ml aislado o como disolvente para completar nebulización de otras medicaciones.
SUERO SALINO HIPERTÓNICO  3% –     3-5 ml nebulizado a flujo de 6-8 lpm. Se recomienda usar 3-4 veces al día

–     En bronquiolitis aguda

N-ACETILCISTEINA –     300 mg nebulizados a flujo 6-8lpm en pacientes con patología respiratoria crónica (fibrosis quísitica…)

 

BIBLIOGRAFÍA

  1. González Brabin A, García Teresa MA, García-Salido A. Oxigenoterapia. Pediatr Integral 2021; XXV (1): 38–44.
  2. Pilar Orive FJ, López Fernández YM. Oxigenoterapia de alto flujo. An Pediatr Contin. 2014; 12: 25-9.
  3. Benito Fernández J, Paniagua Calzón N. Protocolos diagnósticos y terapéuticos en urgencias pediátricas. Diagnóstico y tratamiento de la bronquiolitis aguda en urgencias. Sociedad Española de Urgencias de Pediatría (SEUP), 3ª Edición, 2019.
  4. Paniagua Calzón N, Benito Fernández J. Protocolos diagnósticos y terapéuticos en urgencias pediátricas. Diagnóstico y tratamiento de la crisis asmática en urgencias. Sociedad Española de Urgencias de Pediatría (SEUP), 3ª Edición, 2019.
  5. Angoulvant F, Bellêttre X, Milcent K, et al. Effect of Nebulized Hypertonic Saline Treatment in Emergency Departments on the Hospitalization Rate for Acute Bronchiolitis: A Randomized Clinical Trial. JAMA Pediatr. 2017; 171(8):e171333.
  6. Woods C. Croup. Pharmacologic and supportive interventions. En: UpToDate.
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